miércoles, 18 de febrero de 2015

Pensamientos de avión

No quiero saber los kilómetros ni las personas que nos separan. Sinceramente no me importa. Sé cuando te siento cerca, como si algo nos hubiera empujado a pensar el uno en el otro a la misma vez. Pasa de vez en cuando y lo siento muy fuerte dentro, en algún lugar del pecho.
Sueño despierta a menudo y es divertido pensar que las cosas podrían cambiar en un abrir y cerrar de ojos si alguno de los dos se atreviera a cerrarlos y tirarse al vacío.
Es entretenido pensar desde el avión de vuelta, una vez pasado todo, que podría haberte encontrado en este viaje. Haberte visto desde la distancia y reconocer tu silueta y tu pelo negro azabache. Haber salido corriendo detrás tuya, sin pensar, como una niña tonta, y reencontrarnos como dos amigos de la infancia que hace años que no se ven.
Imagino casi como un recuerdo una mezcla de emociones en tu gesto: sorpresa, alegría, melancolía, desconcierto, vergüenza.
 No me importa. Ya no me importa nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario