sábado, 14 de abril de 2012

El suelo seguirá mojado

París, Viena, Moscú, Londres, Melbourne, Chicago, Miami, L.A, Roma, Atenas, Bombai... Olvidarme de todo. Me he pasado la vida intentando olvidar que te perdí entonces, intentando olvidar tus ojos, tu cara arrepentida mientras nos decíamos adiós. He viajado por cada rincón buscando algo que llene el vacío que me dejaste, el agujero negro en mi corazón.
A pesar de todo lo que siempre quise y que finalmente parecí obtener, sigo echando de menos aquel lugar entre tus brazos.
Tengo miedo de no encontrarte nunca, a pesar de las ganas que tenía de perderte de vista entonces.
Todo lo que ha llovido en aquel lugar donde solíamos encontrarnos... El suelo seguirá mojado, supongo.
Todavía me despierto a veces con frío inexplicable, pensando en aquel calor que tú irradiabas, cada noche, cada mañana.

lunes, 9 de abril de 2012

Dejamos de conocernos

Era una niña, ¿qué pudo llamarte la atención de mí? ¿Mis inocentes catorce años? ¿Fueron mis tirabuzones para la ocasión o ese vestido de color rojo? Era una niña, y más para tus ojos, que tanto habían visto. No entiendo, qué viste, qué hizo que me llamaras, qué hizo que meses más tarde olvidaras mi existencia a pesar de tenerme tan presente.
Yo no estaba preparada para que alguien como tú entrara en mi vida, pero dio igual porque te asomaste por la puerta y te fuiste. No estaba preparada para tus largos dieciocho años.
Todavía me pregunto, de vez en cuando, en mis ratos muertos, qué pasó esa noche en la que "nos conocimos" y que pasó ese día en el que "dejamos de conocernos".